“YO transmuto, regenero y vivifico todo aquellos que mi insigne ser compenetra.
¿Acaso creéis que YO morí colgado
del madero? Jamás la muerte estuvo presente en mi vocabulario: YO SOY LA VIDA , y la VIDA se redimensiona
constantemente. No me matasteis, no podéis, ni siquiera, lacerar la voluntad de
Aquel que me envió y por el cual yo caminé los senderos polvorientos de vuestro
mundo. Me presté, cual hijo obediente a su Padre, a los designios crueles de
vuestra arrogancia; los deseos sádicos y sedientos de sangre de vuestro
inoperante concepto de vida y de muerte. Bebí del cáliz amargo de la desilusión
de no haber sido comprendido; tragué, sorbo a sorbo, cada lágrima derramada por
la iniquidad del hombre. Ni los clavos atravesado mi carne, ni la corona de
espinas desgarrando mi frente, ni tan siquiera la punta de la lanza de Longinos
pudieron acabar con mi hálito de VIDA: LA MUERTE
NO EXISTE !!!. Con mi sacrificio os enseñé que, más allá del
orbe de la Tierra ,
existe otro mundo, mi mundo, en donde los tentáculos de los poderosos de
vuestro mundo no pueden llegar a alcanzar. En donde las tinieblas espirituales
no existen; en donde el dolor, fruto de la experimentación dual, es superado
por la felicidad creadora y el conocimiento pleno de la verdadera existencia
del espíritu como parte inseparable del TODO. No obstante cada pascua me
volvéis, nuevamente, a traer al recuerdo folklórico de vuestro tiempo, sin ni
siquiera llegar a comprender el verdadero significado de mi sacrificio.
Aprovechad, potentes políticos y
religiosos, aprovechad el poco tiempo que os queda, porque pocas ya serán las
pascuas que volveréis a celebrar. Pocas serán ya las pascuas en las que me
recordaréis clavado a un madero. Pronto muy pronto, como ya les prometí, en
otrora tiempo, a mis parvulitos, volveré entre vosotros y con gran Poder y
Gloria instauraré el Reino de mi Padre sobre los escombros de vuestros
mastodónticos imperios izados sobre los cimientos de tantos inocentes
sacrificados por vuestra egocéntrica ignorancia arrogante. Pronto muy pronto los
que sufriréis el estectror de la Verdadera
Muerte seréis vosotros, potentes de la Tierra. Y esta vez de hecho, no
habrá otra resurrección para vuestros innominables espíritus.
VUESTRA SOCIEDAD NECESITA TESTIGOS DE CRISTO.
A través del Pensamiento Solar
osmar. como todo lo publicado , me encanto gracias.
ResponderEliminarA TI HERMANO TE DOY LAS GRACIAS.
ResponderEliminarUN FUERTE ABRAZO.